ese oceano infinito que nos conduce
a su antojo por los vastos desiertos que
nunca acaban.
Por las inmensas llanuras del desespero
que nos azotan a diario el corazon.
Ese oceano infinito que nos castiga
de continuo con crueles vientos sin fin
que cuestionan nuestra vida hasta hacerla
temblar y a veces caer sin remision.
Ese oceano infinito que recoge nuestras
lagrimas de un llanto sincero,
que se desprenden de mi...
alma herida...
No hay comentarios:
Publicar un comentario